27 de agosto de 2018

[Análisis] Sword Art Online: Lost Song

2015 fue el año en el que Sword Art Online se dio a conocer seriamente fuera de Japón, ya que recibimos oficialmente sus novelas ligeras, la primera temporada de su serie de animación, el relanzamiento de Sword Art Online RE: Hollow Fragment (PS4) y su secuela, Sword Art Online: Lost Song, en PlayStation 4 y PlayStation Vita.

Perdiendo su su port a PlayStation 3 en el camino, la versión de PlayStation 4 nos llegaba en las mismas fechas que en tierras niponas y traducida a varios idiomas (español incluido) y, como parte de su promoción, las primeras unidades incluían un código para descargar gratuitamente Hollow Fragment, lo que demostraba la clara apuesta por esta saga desde Bandai Namco.

Teniendo en cuenta que hace unos días nos llegaba el título original a PC, esta entrega debería ser la próxima en llegar a ordenadores, por lo que si os preguntáis qué es lo que podéis esperar de esta secuela de la saga videojueguil de Sword Art Online antes de su llegada a ordenadores o ahora que está de oferta en PSN, acompañadnos en este análisis.

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Creado por ArtDink, Lost Song nos lleva al mundo de las hadas en el VRMMO Alfheim Online (ALO). De la misma manera que en el anterior juego empezábamos en un momento determinado de la historia original de Sword Art Online, en este caso ocurre lo mismo, llevándonos a un momento en el que Kirito y sus amigos se han adaptado a ALO y se lanza una nueva expansión para el VRMMO, con el nombre de Svart Alfheim, un continente formado por islas flotantes y cuyo objetivo principal de dicha expansión es superar las cuatro más importantes, repletas de mazmorras, esperando ser exploradas.

A diferencia del anterior juego, este es mucho más relajante para nuestros protagonistas en el sentido de que la muerte no aguarda a la vuelta de la esquina ya que, para los que conozcan el material, ALO funciona de manera segura gracias al nuevo dispositivo Amusphere, con medidas de seguridad superiores a su predecesor, el Nervegear. Por lo tanto, no hay miedo en que vuelva a ocurrir otro incidente como el que ocurrió en Sword Art Online.

La aventura comienza con la entrada de Kirito y Leafa el primer día del lanzamiento de la expansión. Tras un breve tutorial de combate y vuelo, se encuentran con el resto del círculo de amistades en la Ciudad Flotante de Ryne, donde tras una charla, se animan a hacer la primera mazmorra donde descubrirán que se enfrentan a un gremio llamado Shamrock, liderado por Seven, una importante científica del VR e idol, en una carrera por completar la expansión.

El juego no tarda en meterte de lleno en la acción, ya que cuenta con que el jugador conozca a los personajes y el mundo de ALO. A diferencia del anterior, este tiene un ritmo que crece de manera gradual conforme avance la trama. Sin embargo, debido al ritmo de misiones y mazmorras, acaba perdiendo bastante frescura a mitad del camino por culpa de la reiteración, aunque lo compensa con una recuperación bastante loable en en la recta final.

En lo que respecta los personajes, tendremos nuevas incorporaciones con respecto a la historia conocida en el anime con importancia capital en este título, de igual manera que pasó en Hollow Fragment. La relación entre los personajes sigue resultando igual de efectiva, pero con menos clichés y escenas absurdas, lo cual se agradece. Mediante momentos de conversación estilo Novela Visual o kits de la serie Tales of, podremos saber sus opiniones lo que está ocurriendo a medida que vivimos los acontecimiento y se profundiza bastante en ellos mediante eventos especiales bastante agradables.

Para acabar esta sección, hay que remarcar que, a diferencia de Hollow Fragment, en este título no hay opciones de romance, solo una escena especial para cada una de las chicas conforme se avance en la trama. No es tan complejo como en Hollow Fragment pero no involucra al jugador, lo cual se queda en una anécdota.

La primera sensación que da Lost Song tras comenzarlo es que es mucho más ligero y libre que su predecesor, Hollow Fragment. Los mapas de campo son enormes, y están poblados por cientos y cientos de criaturas, tanto terrestres como aéreas, invitando a la exploración con la mecánica de vuelo. Llanuras, desiertos, zonas árticas,..., es un gran trabajo lo que hicieron con las zonas exteriores. No se puede decir lo mismo de las mazmorras, donde quedando limitados al movimiento terrestre, es palpable que estas zonas resultan mucho menos trabajadas, acusando mucho el reciclaje de escenarios donde a veces tendrás la sensación de estar en la misma mazmorra con unos elementos añadidos para hacerla diferente. La interfaz es mucho más sencilla de manejar ya que tendremos acceso a los objetos y órdenes de acción en la esquina inferior izquierda, y al mapa en la esquina superior derecha. Además, a diferencia del anterior, en este juego podrás pausar la acción en cualquier momento (algo extraño para un RPG que simula un VRMMO) para reconocer mejor la situación y los posibles peligros que nos asechen.

En esta ocasión, podremos tener en el equipo hasta tres personajes y no es necesario tener a Kirito en el mismo, por lo que podrás manejar al personaje que desees libremente. Cada uno de ellos puede manejar hasta tres tipos de armas y magias de todas las variantes, desde curativas, ofensivas a de apoyo y debuff. Es necesario tener en cuenta que los personajes sólo suben de nivel si van contigo en el grupo, por lo que no hay autonivel como en otros rpgs, para compensar el alto número de personajes disponibles. Invita mucho a crear diferentes equipos e irlos probando, teniendo en cuenta que cada aliado tiene ciertas especialidades: Lisbeth usa martillos, por lo que es más eficaz contra los enemigos acorazados o Sinon, que es especialista a distancia gracias al control del arco, podrá acabar con enemigos voladores con facilidad. Puedes cambiar el grupo en la posada, aunque se echa en falta poder cambiar de personaje en cualquier momento para poder adaptarnos mejor a las situaciones y no tener que hacer tantos viajes, que tampoco es que sean totalmente obligatorios, pero ayuda a mejorar la sensación de que somos un clan.

El sistema de combate es completamente dinámico. Primeramente, contamos con dos tipos de ataque básicos: débil y fuerte, con los que podremos combinarlos a nuestro antojo siempre y cuando la barra de energía no se agote. Además contaremos con habilidades de arma con las que podremos desencadenar combos poderosos al adversario. Combatiendo, mejoraremos el dominio del personaje sobre el arma o conjuros/habilidades que esté usando, desbloqueando nuevas habilidades y aumentando nuestra potencia.

La posibilidad de volar tiene una gran incidencia en el combate y también en la exploración. Lo primero que debes saber es que hay tres estilos de vuelo: flotación (en el que te deslizas por el aire), vuelo (el vuelo sin más) y otro en el que en modo vuelo vas a velocidad supersónica para recorrer largas distancia o escapar. Es precioso volar por los escenarios viendo lo que tienes a tu alrededor, recogiendo objetos, disfrutando de la inmensidad de las zonas y lo repletas que están de criaturas.
En combate, lo preferible es mantenerse en flotación para tener control, aunque es útil cambiar al modo vuelo para escapar de los enemigos o hacer una carga en el mejor momento. El límite de lo que puedes hacer está en tu imaginación.

Con respecto a los enemigos, los que más destacan son los aéreos y los acorazados, ya que son los que tienes que cambiar un poco la estrategia de lucha, buscando puntos "blandos" donde golpear (se agradece que el sonido al golpear deje claro si haces más daño o no a un acorazado) o golpear en el aire buscando ese combo que lo fulmine de un  golpe y que no se nos escape para hacernos daño.

Una pega que tiene la cámara en combate es que, cuando fijas a enemigos que se mueven rápido, la visión de la cámara se puede volver algo caótica creando una sensación de desorientación, aunque llegaremos a acostumbrarnos. Este problema con la cámara es bastante común en los títulos bajo el sello de Bandai Namco.

En la Ciudad Flotante de Ryne es donde estaremos la mayor parte del tiempo realizando tareas para el resto del grupo o acudiendo a eventos de conversación y desde donde podremos partir a las diferentes islas gracias al punto de teletransporte . A diferencia de Arc Sophia, de Hollow Fragment, esta ciudad es mucho más pequeña y solo destaca por tener diferentes NPC andando de aquí para allá. En ella, tendremos acceso a diferentes establecimientos donde podremos comprar equipamiento, mejorarlo con la herrería de Lisbeth y podrás cambiar la formación en la posada, entre otras cosas. Aparte, es necesario mencionar las misiones de cacería, la existencia del multijugador y la creación de tu propio personaje, que resulta bastante limitada, ya que las opciones son realmente reducidas. A pesar de ello, es un título con una duración básica bastante correcta, rondando las 25 o 30 horas, aunque el modo multijugador y el Nuevo Juego+ puede dar para bastante más.

Eso sí, no resulta un título particularmente complejo, raramente estaremos en problemas serios e, incluso si se nos atasca algún momento, siempre podremos reducir la dificultad manualmente sin ningún problema.

En este apartado lo primero que hay que entender que el juego se hizo pensando en PlayStation 3 y Vita por lo que es normal que para los que jueguen en sistema más potentes que resulte bastante sencillo gráficamente pero se compensa con el espectáculo que da con los escenarios de campo de las islas: el movimiento de la hierba, la caída de copos de nieve... Luego está el diseño de personajes, que aunque está unos pasos por delante de Hollow Fragment, tampoco supone un portento técnico, aunque el uso del cel shading crea un ambiente animado que nos deja buenos detalles en cada personaje que controlamos.

Los temas musicales que acompañan cuando vas por el aire o cuando exploras una mazmorra son sencillos, acompañando el momento y poco más, aunque la Banda Sonora gana enteros al combatir contra jefes, usando temas que recordarán a la propia serie de animación. Lo mismo se puede decir del tema musical que abre el juego, "Cynthia no Hikari", cantado por Eir Aoi, la cual ya ha interpretado temas en el mismo anime (Innocence y Ignite).

Sword Art Online: Lost Song no podía haber tenido una mejor manera de interpretar el mundo de ALO: total libertad de movimiento de vuelo para explorar dejando impresionado al usuario por la extensión y la enorme cantidad de criaturas. Sus puntos flacos, como hemos comentado, se quedan en el pobre diseño de las mazmorras, la escasa variedad de monstruos y ciertos problemas con la cámara.

Es una buena secuela de Hollow Fragment, por lo que es necesario haberlo jugado para entender mejor las menciones de este título o porque aparecen personajes que se iniciaron en el primer juego, aunque tampoco se puede decir que no se puede comprender la trama sin el mismo.

¿Es recomendable? Si eres fan de la franquicia, es un sí definitivo. Si no lo eres, debes valorar si te gusta los ARPGs de acción libre con misiones de caza, exploración y búsqueda de objetos. Desde luego, si quieres saber como es un juego de Sword Art Online, este es uno de los títulos más recomendables para darle una oportunidad.

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